Al hablar a favor del dictamen que reforma el artículo 2o. de la Constitución Política en materia de pueblos indígenas, así como afromexicanos, la diputada Vanessa López Carrillo destacó que reconocer a estos grupos sociales como sujetos de derechos es la mejor oportunidad para saldar la deuda histórica que existe con ellos.
Por décadas, gobiernos neoliberales construyeron extenso historial de violencia contra estas comunidades
Durante la sesión de hoy, la integrante del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo (GPPT) enfatizó que por décadas, los gobiernos neoliberales, construyeron un extenso historial de violencia contra las comunidades originarias y afromexicanas y centraron sus esfuerzos en explotar sistemáticamente las tierras, culturas, lenguas, todo esto disfrazado de desarrollo.
“El reconocimiento constitucional de un Estado pluricultural significa el rompimiento con las políticas homogeneizadoras y asimilacionistas impuestas por el neoliberalismo y que han sido, actualmente, consideradas en el Plan C”, comentó.
La legisladora por Michoacán recalcó que los anteriores gobiernos discriminaron a los pueblos indígenas y afroamericanos, mediante la marginación. “Los resultados económicos no justifican el daño social. No se trata más que de una desatención estructural y sistematizada de exclusión e injusticias que se encargaron de perpetuar las violencias y concentrar el poder”.
La petista celebró que nuevamente la Cuarta Transformación se coloque a la vanguardia de la justicia en favor del pueblo mexicano y de las comunidades indígenas y afrodescendientes, a través de esta reforma constitucional, la cual será piedra angular para el ejercicio de su libre determinación y autonomía.
“La reforma propuesta en materia de pueblos y comunidades indígenas y afroamericanas, incluida en el Plan C, es un plazo crucial en el proceso de reconciliación y justicia social. ¡Vivan los pueblos originarios y afroamericanos! ¡Viva el pueblo purépecha! ¡Viva Michoacán! Y ¡Viva México!”, sentenció la congresista del PT.