Yo soy una diputada, compañera de la cuarta transformación. Y les diría que las mujeres de la 4T, en nombre de Josefa Ortiz de Domínguez, nos sentimos sumamente orgullosas de ser parte de este movimiento sin violencia que busca la transformación del país. Y por eso cuando recordamos a Josefa Ortiz de Domínguez, de la mujer esposa de un regidor que pudo salir adelante por su valía, por su razón de defender al pueblo de México, nosotras nos sentimos más que orgullosas de continuar con ese legado.
No permitiremos que manos extranjeras pretendan arrebatar lo que por derecho le corresponde a las y los mexicanos
El 8 de marzo, que en breve estaremos conmemorando, significa justamente ello: voltear a nuestras raíces e identificar a las mujeres que nos han dado patria. Y Josefa Ortiz de Domínguez sin lugar a dudas lo representa, no en el papel de esposa detrás de un hombre, de una mujer que supo enarbolar esta lucha, y que a pesar de sus carencias académicas pudo contender, avisar y provocar las reuniones de conspiración que buscaron la independencia de este país.
Por supuesto que la reconocemos, por supuesto que la llevamos en el corazón, por supuesto que las mujeres de la cuarta transformación seguiremos levantando esa bandera. Porque no permitiremos un nuevo imperio en México, no permitiremos que manos extranjeras sigan buscando arrebatarnos lo que por derecho nos corresponde. Las mujeres de la cuarta transformación tenemos la capacidad, tenemos todo el saber que requerimos para sacar adelante este país.
Y miren, compañeras y compañeros, aprovechamos todos los espacios para venir a denostar lo que tanto trabajo nos ha costado llegar a realizar en este país. Y sé que les duele, porque los privilegios que están perdiendo los quisieran recuperar. Pero hay mujeres de garra, de entrega, de corazón que con la bandera de Josefa Ortiz de Domínguez seguiremos buscando los espacios y seguiremos reiterando nuestro compromiso, nuestro corazón para que las gestas heroicas que se vivieron en este país se sigan enalteciendo. Yo soy Maribel Martínez Ruiz, soy diputada de la cuarta transformación y no hay nada que me haga sentir más orgullo. Es cuanto.
