El diputado federal, Gerardo Fernández Noroña, calificó de deplorable el actuar del gobierno del Estado de México, toda vez que pretende destruir una zona del municipio de Jilotzingo, de más de 230 hectáreas de bosque, para la construcción de un fraccionamiento residencial de alto costo, llamado “Bosque Diamante”.
Lamentable la intervención del gobernador del Estado de México que solicitó revisar el tema de la construcción de un fraccionamiento en la localidad
En conferencia de prensa, en la que estuvo acompañado de un grupo de habitantes de la localidad, el vicecoordinador del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo (GPPT), detalló que, el litigio para frenar estas obras, ya se había ganado; sin embargo, una lamentable intervención del gobernador de la entidad, para solicitar la revisión del tema, dio como resultado que se volviera a abrir el camino para la destrucción de esta franja boscosa.
Al respecto, el congresista por la Ciudad de México, destacó la resistencia heroica de las comunidades y pueblos, tratando de detener esta destrucción irracional, donde lo único que importa es el dinero y no la vida, el planeta, la tierra, el agua y todo lo que se encuentra alrededor de ella.
Finalmente, el legislador denunció un conflicto agrario, en el ejido de Santa María Mazatla, en el mismo municipio de Jilotzingo, ya que se intenta hacer un despojo de 64 hectáreas para la construcción de un fraccionamiento de lujo y un campo de golf, en perjuicio de los habitantes de esta zona.
“El Estado de México tiene amplias zonas boscosas, que se han ido perdiendo por la voracidad, la corrupción y la impunidad que existe en la entidad, tal como está sucediendo en esta localidad”, finalizó el legislador petista.
