El vicecoordinador del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo (GPPT), Gerardo Fernández Noroña, sostuvo que, derivado de la actividad económica, el impacto en la naturaleza y en las comunidades es inevitable; no obstante, hizo un llamado para que, con la Reforma Eléctrica, se encuentre una manera de respetar plenamente los derechos de los pueblos originarios.
Empresas privadas, al favorecer supuestos proyectos de energías limpias, han hecho tropelía y media en contra de las comunidades indígenas
Durante su participación en el Foro 22 del Parlamento Abierto de la Reforma Eléctrica: “Usuarios, Pueblos Indígenas y Electricidad”, el legislador petista denunció que las empresas privadas han favorecido aparentes proyectos de energías limpias, que únicamente han generado tropelía y media en perjuicio de las comunidades indígenas.
El parlamentario insistió en que la oposición miente al plantear supuestas ventajas en la reforma de 2013, respecto a energías limpias, así como afirmar que habrá incertidumbre con la Reforma Eléctrica presentada, la cual no existe, toda vez que los particulares podrán seguir en el mercado nacional hasta con un 46 por ciento.
“Las energías eólicas y fotovoltaicas tienen preferencia absoluta y están consideradas dentro del paquete de energías limpias. Lo que pasa es que va a ir primero la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Es una locura el esquema que la oposición plantea, que primero le compremos a los privados”, sostuvo.
Respecto a organismos públicos independientes, aseveró que son fundamentales para la planeación; detalló que el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) no puede ser parte de los intereses particulares por cuestiones de soberanía, estrategia y garantía del sistema eléctrico nacional, en tanto, la Comisión Reguladora de Energía (CRE) ha sido un espacio de intereses privados, por lo que expresó su convencimiento de desaparecerla, al servir a intereses de éstos.
“Hoy se les ha permitido a todos los particulares conectarse. Comisión Federal de Electricidad tiene una capacidad equiparable de 42 mil mega watts y las privadas un poquito menos y solo necesitamos 47 mil para el país. O sea, todo mundo conectado, es un despropósito, es un sinsentido”, concluyó el diputado.
