La diputada federal, Magdalena Núñez Monreal, señaló que el pueblo de México no debe cargar más con la deuda, odiosa y repudiable, del Fondo Bancario de Protección al Ahorro (FOBAPROA)-Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB), toda vez que protege a los grandes deudores, al consumar la conversión de centenares de millones de pesos de deudas privadas, adquiridas de manera oscura y con base en el influyentismo, en deuda pública.
Para 2023, 54 mil millones de pesos del presupuesto de la nación van destinados a ese pago; llegó el momento de repudiarla por ser inmoral e ilegítima
En conferencia de prensa, en la que estuvo acompañada por integrantes de la Promotora por la Suspensión del Pago de la Deuda, la legisladora del Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo (GPPT) sostuvo que, bajo esa estrategia, no se terminará de pagar dicho adeudo, por lo que llegó el momento de repudiarla por ser ilegítima e inmoral y como ejemplo, ahondó, para el 2023, 54 mil millones de pesos del Presupuesto irán destinados a ese pago.
“Si bien la deuda original rondaba los 552 mil millones de pesos, desde ese entonces, todos, la sociedad mexicana, ha abonado a la misma, más de mil millones de pesos. Desde hace más de dos décadas, cada año, el Gobierno Federal, por mandato de la Ley de Protección al Ahorro Bancario, solicita incluir en el Presupuesto de Egresos de la Federación multimillonarias cantidades para abonar al pago de esa onerosa deuda”, detalló.
Derivado de lo anterior y aunado a que, hoy en día, el sistema financiero mexicano logra ganancias históricamente elevadas, la congresista por la Ciudad de México, propuso una iniciativa de Ley de Repudio a la Deuda del FOBAPROA-IPAB y, con ello, ser consecuentes con la filosofía y las promesas de la Cuarta Transformación (4T) y dejar de pagar con fondos del Presupuesto Federal estos compromisos.
Al respecto, la también Secretaria de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, aseveró que ese dinero público debería destinarse a apoyar las necesidades más apremiantes de la sociedad mexicana, como el campo, la educación, la salud, la vivienda, entre otras tantas, sin embargo, se sigue utilizando para saldar las deudas heredadas del pasado neoliberal y de corrupción que envolvió a nuestra nación por décadas.
“Esta deuda que enfrentan todas y todos los mexicanos, sin distinción de edad, clase social o posición económica, afectando definitivamente a los más pobres y excluidos, es injusta. Es en ese sentido que, para el Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo en la Cámara de Diputados, ha llegado el momento de hacer algo en relación a este asunto y pasar de las denuncias y el deseo de visibilizar este problema a las acciones”, concluyó la legisladora.
