“Durante los meses de abril a septiembre, diversos estados de la República Mexicana reportan temperaturas máximas extremas, que pueden llegar a ser de hasta 50.1°C, lo que provoca que el uso del aire acondicionado sea indispensable y, en consecuencia, las tarifas eléctricas aumentan de forma exponencial, lo que impacta directamente en la economía familiar”, alertó el diputado Leobardo Alcántara Martínez, del Partido del Trabajo (PT).
Con esta modificación se busca apoyar la economía de las familias mexicanas
En ese sentido, el legislador añadió que la Comisión Federal de Electricidad informó que el aire acondicionado es uno de los aparatos que más consumen energía eléctrica en el hogar. “Se estima que el uso de un aire acondicionado de ventana (1.5 toneladas) por 7 horas al día, puede llegar a representar un costo bimestral de 4 mil 528 pesos y un costo anual de 27 mil 168 pesos”.
Por eso, el congresista sinaloense propuso reformar el artículo 139 de Ley de la Industria Eléctrica, a fin de implementar un mecanismo para determinar de manera más adecuada el cobro de las tarifas eléctricas; “para ello, proponemos que en el establecimiento de la clasificación de las tarifas 1 a la 1F se considere como criterio la sensación térmica en lugar de la temperatura media mensual en verano”.
Explicó que actualmente la metodología para las tarifas de Suministro Básico se determina tomando como referencia la temperatura media, siendo la tarifa 1F la más económica y la de mayor consumo.
“Para acceder a ésta es necesario alcanzar una temperatura de 31 grados centígrados; no obstante, esta forma de medir no es adecuada, porque en condiciones con alta humedad atmosférica se tiene una sensación de calor mayor. Por ejemplo, a una temperatura de 35ºC con humedad al 25%, la sensación de calor es de 35ºC; sin embargo, con el 70% de humedad ésta es de 51ºC, en consecuencia, se hace necesario incrementar el uso del aire acondicionado”, detalló.
Alcántara Martínez abundó que en los lugares con mayor humedad, aunque tienen sensación de temperatura más alta, no pueden acceder a la tarifa F1, tal como sucede en Mazatlán, que durante gran parte del año presenta una sensación térmica superior a los 31 grados.
“De ahí la importancia de cambiar la metodología, para beneficiar a las zonas que son consideradas con temperaturas mínimas y máximas extremas, porque al igual que con el aumento de calor, al bajar las temperaturas se incrementa el uso de los calefactores y por ende el aumento en los recibos de luz”, aseveró.
Finalmente, el petista sostuvo que con esta modificación se busca apoyar la economía familiar de las y los mexicanos que viven en lugares con climas extremos, “que se ven obligados a incrementar el uso de calefactores o aires acondicionados, para sobrellevar las condiciones adversas del clima de los sitios en los que radican”.
